QUERIENDO RESPIRARTE
¿Por qué no te hemos amado Jesús para vivir tan intensamente como quisieras?. “Estoy triste hasta la muerte” dijiste cuando orabas sabiendo que se acercaba la hora de tu crucifixión. Estabas sumamente abatido por la tristeza, tus fuerzas estaban quebradas, el dolor por nosotros te mató por dentro más que el dolor de la crucifixión… Te entregaste por un mundo que no te vio como Mesías, por un mundo que no merecía tu entrega ni tu dolor, no lo merece ni merecerá jamás, pues ninguno puede ni podrá pagarte lo que has hecho por amarnos como nos amas aún. Muchos no te reconocen ni valoran como lo único que esencialmente vale la pena en nuestra vida. Si tan solo nos acercáramos un poco más para escuchar hasta tu respiración... para escuchar así con esmero lo que Tú anhelas que sepamos… Tu gran amor por nosotros… si tan solo creyésemos en ti. Un día a la vez quiero vivir mi Cristo, es lo que pido de ti, dame la fuerza para vivir un día a la vez intensamente en tu eterno amor y “conocerte” como debiera por mi bien. Enamórame de tí Señor, ayúdame a “vivir” en ti y para ti.
Comentarios
Publicar un comentario